La revista Psicothema fue fundada en Asturias en 1989 y está editada conjuntamente por la Facultad y el Departamento de Psicología de la Universidad de Oviedo y el Colegio Oficial de Psicología del Principado de Asturias. Publica cuatro números al año.
Se admiten trabajos tanto de investigación básica como aplicada, pertenecientes a cualquier ámbito de la Psicología, que previamente a su publicación son evaluados anónimamente por revisores externos.
Psicothema, 1992. Vol. Vol. 4 (nº 2). 612-614
Lilianne Manning (Coord.). (1992)
Madrid: Trotta, 420 pp.
REVISION DE LIBROS/BOOK REVIEW
Esta excelente obra pretende y en gran medida consigue ofrecer una visión del progreso experimentado por la neuropsicología del lenguaje desde sus postulados tradicionales hasta los modelos explicativos, de análisis, evaluación y rehabilitación, basados en el paradigma del procesamiento de la información. El libro se organiza en tres partes que hacen referencia, precisamente, a los aspectos teóricos, de evaluación y de rehabilitación del lenguaje.
La parte teórica incluye cuatro capítulos que presentan en orden lógico el proceso histórico seguido en el estudio de la afasia. En el capítulo 1, Neuropsicología del lenguaje: visión clásica, escrito por Lilianne Manning, coordinadora de la obra y autora de buena parte del texto, se hace un excelente y exhaustivo resumen de los principales procedimientos taxonómicos clásicos de la afasia, así como una valoración crítica de la utilidad clínica de los mismos. Una alternativa a las taxonomías anátomo-clínicas de la afasia es ofrecida por la visión cognitiva, en el capítulo 2, en el que bajo el título Neuropsicología cognitiva del lenguaje, la misma autora analiza profusa y detalladamente la definición de la neuropsicología cognitiva, los supuestos básicos en los que se apoya, adentrándose en detalle ene le studio del elenguajes desde esta perspectiva y los componentes de la estructura modular del lenguaje verbal y escrito. Importancia especial se concede a la metodología utilizada en neuropsicología cognitiva del lenguaje, comparando cuatro modelos de proceder en base a N=1, habida cuenta que la delimitación de síndromes o la utilización de categorías taxonómicas debe sustituirse, por inncecesario, por la comparación entre patrones individuales de síntomas y teorías cognitivas; es decir, en qué medida el análisis de las alteraciones observadas en cada paciente individual permite corroborar o desconfirmar un modelo teórico de los subsistemas implicados en la función del lenguaje. Los neuropsicólogos cognitivo, lejos de exagerar la importancia de la localización cerebral, como sucede con los diversos enfoques de la neuropsicología clásica, sostienen que solmente cuando se logra entrever la organización de un sistema funcional será posible pasar a su implementación neurológica. El capítulo finaliza con un interesante análisis comparativo de las diferencias existentes entre la neuropsicología basada en el procesamiento de la información y los fabricantes de diagramas de la neuropsicología tradicional, así como con una discusión de las críticas actuales al enfoque cognitivo.
M. L. Sánchez Bernardos presenta en el capítulo 3, bajo el título de Lenguaje escrito: trastornos de la lectura y la escritura, un modelo cognitivo de adquisición de la lectura en base al cual se pretenden reducir las diversas manifestaciones clínica de dislexia. Idéntica estrategia sigue para la escritura y la comprensión clínica de las disgrafías. Ambos modelos parten del supuesto de la existencia de dos rutas, visual y fonológica, que están implicadas en los procesos de lectura y escritura. La anomia y el agramatismo son detalladamente analizados en el capítulo 4 por la misma autora y P. Martín contraponiendo una conceptualización desde la neuropsicología clásica sobre dichas alteraciones del lenguaje y un intento de comprensión taxonómica basado en la psicolingüística. Este capítulo, eminentemente teórico, finaliza con la exposición y análisis de casos clínicos.
La segunda parte del texto, dedicado a la evaluación de la afasia, es la más extensa e incluye seis capítulos. El primero de ellos, titulado Exploración del paciente afásico: enfoque tradicional, ha sido escrito por L. Manning y P. Martín y constituye una revisión de los objetivos del examen de la afasia, las áreas básicas de examen, tanto de la expresión como de la comprensión verbal, y una breve presentación de los instrumentos y baterías más utilizados, destacando sus aspectos diferenciales y fundamento teórico. La utilización de los procedimientos clásicos de evaluación clínica son considerados por las autoras como meros instrumentos de discriminación grosera, que deberían ir seguidos de un análisis psicológico más exhaustivo.
El capítulo 6, que lleva por título Daño funcional selectivo: neuropsicología cognitiva aplicada, constituye, conjuntamente con el capítulo 2, el eje central y la aportación más importante de la obra, siendo el aspecto más novedoso respecto a la neuropsicología tradicional. Siguiendo la metodología N=1, L. Manning expone nuevamente los modelos cognitivos del lenguaje, centrándose particularmente en el mapa de codificación y descodificación de palabras habladas y escritas de Ellis y Young (1988), mediante una descripción de los efectos clínicos observados como consecuencia de la afectación de los sistemas e interrupción de las interconexiones. Con especial detenimiento aborda los puntos de vista actuales sobre la existencia de un sistema semántico amodal frente a las teorías de sistemas semánticos específicos para cada modalidad sensorial. Se ilustra la metodología de la valoración cognitiva del lenguaje con la presentación e interpretación de dos casos clínicos. Por otra parte, en este capítulo se hace una detallada guía de la exploración de la afasia cruzada y de la afasia óptica.
La comparación de los hallazgos del examen neuropsicológico con resultados brevemente de criterios externos objetivables siempre ha sido importante, tanto para conocer con mayor exactitud las repercusiones funcionales de un determinado trastorno o lesión, como para el propio avance la neuropsicología en su objeto de comprensión de las bases físicas de los procesos mentales. En el capítulo 7, J. León Carrión hace una exposición de las técnicas de imagen para el estudio de la afasia: Tomografía Axial Computarizada (CAT), Resonancia Magnética Nuclear (NMR), Flujo Sanguíneo Regional Cerebral (RCBF) y la Tomografía de Emisión de Positrones (PET). La ventaja específica de los métodos RCBF y PET radica en que permite medir cambios funcionales en el cerebro durante la ejecución de una tarea, en contraposición con los datos estructurales suministrados por la NMR y los CAT scans.
Una descripción del Test de Boston (Goodglass y Kaplan, 1972), considerada como la batería más completa para la evaluación de la afasia; del Indice de Porch para el estudio de la afasia (PICA) (Porch, 1967), batería de gran utilidad para el diseño de un plan de rehabilitación; y del test de Capacidades Comunicativas den la vida diaria (CADL) (Holland, 1980), presentada como la batería que mejor logra captar la comunicación residual, verbal y no verbal, del paciente; así como las características de la adaptación española, se realiza en sendos capítulos escritos por M.L. Sánchez Bernardos, J. Sangorrín, y L. Manning y P. Martín, respectivamente.
Dos son los trabajos finales que componen el apartado dedicado a la rehabilitación de la afasia; ambos escritos por L. Manning. En el primero de ellos hace una revisión teórica del estado actual de las técnicas de rehabilitación, de los fundamentos en los que se apoyan los procedimientos basados en el condicionamiento operante, la tradición soviética de la escuela de Luria, las técnicas basadas en la estimulación y la aproximación cognitiva. La autora pone de manifiesto, sin embargo, los problemas que todavía encierra la aproximación cognitiva a la rehabilitación, especialmente cuando no se cuenta con modelos del funcionamiento normal aplicables a los casos en los que se desea intervenir. Estos y otros aspectos metodológicos se analizan en el capítulo final de la obra, ejemplificando la puesta en práctica de los principios cognitivos en varios casos clínicos. La autora realiza un particular esfuerzo en adoptar una actitud científica en la rehabilitación, atendiendo específicamente a los aspectos metodológicos de la intervención.
La escasez de textos en castellano que pongan en relación los principios de la neuropsicología cognitiva de la afasia y los procedimientos de intervención clínica y la exhaustividad con que se aborda el tema, obliga al lector interesado en el estudio del lenguaje normal y alterado a la lectura de esta monografía.
Finalmente, digamos que el formato del libro, composición y presentación, han sido exquisitamente cuidados.
REFERENCIAS
Ellis, A. y Young, A. (1988). Human cognitive neuropsychology. London: L. Erlbaum.
Goodglass, H. Y Kaplan, E. (1972). The assessment of aphasia and related disorders. Philadelphia: LEA.
Holland, A. (1980). Communicative Abilities in Dily Living (CADL). Baltimore: University Park Press.
Porch, B.E. (1967). Porch Index if Communicative Ability. Volume I: Theory and development. Palo Alto: Consulting Psychologist Press.