https://doi.org/10.7334/psicothema2014.169

Psicothema, 2015.Vol. 27 (nº 1). 32-39

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Arturo X. Pereiro, Sonia Ramos-Lema, Onésimo Juncos-Rabadán, David Facal and Cristina Lojo-Seoane

Background: The Cambridge Cognitive Examination-Revised (CAMCOG) is widely used in clinical, epidemiological and research studies, but normative scores for age and educational level have not yet been established in the Spanish population. Method: The CAMCOG-R was administered to 730 adult members ofthe community, aged between 50-97 years, living throughout the region of Galicia. Initial screening yielded provisional identification of cognitive impairment and depressive symptoms. The final sample consisted of 643 cognitively healthy adults. The following instruments were administered: a questionnaire concerning socio-demographic and clinical data, the Charlson’s Comorbidity Index, the Mini-Mental State Examination, the Montreal Cognitive Assessment (MoCA), the Lawton and Brody Index, a short version of the Geriatric Depression Scale, and the CASP-19 quality of life scale. Results: Internal consistency values of the CAMCOG-R were similar to those obtained for the original scale. The convergent validity between MoCA and CAMCOG-R was good, and the divergent validity between CASP-19 and CAMCOG-R was higher than the recommended value. Percentiles and inter-quartile range for age and educational level were calculated. Conclusions: Psychometric indexes showed that the CAMCOG-R is a reliable and valid instrument, which can generally avoid a ceiling effect. The study findings confirm the importance of specifying the normative data by age and educational level.

Puntuaciones normativas del Cambridge Cognitive Examination-Revised en población española sana. Antecedentes: el CAMCOG es una escala de uso frecuente para el diagnóstico y la investigación de las demencias pero hasta el momento no disponemos de puntuaciones normativas por edad y nivel educativo en población española. Método: se administró el CAMCOG-R a 730 adultos, de entre 50-97 años, que vivían de manera independiente en Galicia. Un cribado inicial permitió excluir a participantes con deterioro cognitivo y/o síntomas depresivos, quedando la muestra final conformada por 643 adultos. Se administraron los siguientes instrumentos: un cuestionario de datos sociodemográficos y clinicos, el índice de Comorbilidad de Charlson’s, el Mini-Mental State Examination, el Montreal Cognitive Assessment, la escala Lawton-Brody, la Escala de Depresión Geriátrica y la escala de calidad de vida CASP-19. Resultados: los valores de consistencia interna fueron similares a los obtenidos con la escala original. La validez convergente con el MoCA fue buena y la divergente con el CASP-19 superó los valores recomendados. Se informa de percentiles y rangos inter-cuartil para cada grupo de edad y nivel educativo. Conclusiones: el CAMCOG-R es un instrumento fiable y válido con capacidad para evitar el efecto techo. Nuestros resultados confirman la importancia de disponer de datos normativos por edad y nivel educativo.